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El equipo de neurocirujanos certificados de Norton Children’s está dirigido por Thomas M. Moriarty, M.D., Ph.D., líder reconocido en el campo con amplia experiencia y formación especializada. Nuestros médicos tienen las herramientas sofisticadas y las habilidades para brindarles a usted y a su hijo un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento para el síndrome de la médula anclada que minimice los riesgos, para que su hijo pueda volver a ser un niño.
La médula espinal anclada es un trastorno neurológico que involucra conexiones anormales entre la médula espinal y los tejidos cercanos.
La médula espinal debe tener la capacidad de moverse libremente dentro del conducto vertebral. Cuando la médula espinal no puede moverse libremente porque está adherida a los tejidos espinales, hablamos del síndrome de la médula anclada. El tejido anclado limita el movimiento de la médula espinal y hace que se estire de manera anormal. Para los niños en crecimiento, esto puede provocar diversos problemas físicos, que incluyen dolor de espalda y piernas, entumecimiento u hormigueo y problemas intestinales.
Hay muchos tipos de anclaje de la médula espinal, algunos más graves que otros. La mayoría se trata con cirugía. El equipo de especialistas en pediatría y neurología de Norton Children’s le explicará la gravedad del diagnóstico de su hijo y repasará los riesgos asociados al tratamiento. Con décadas de experiencia en el tratamiento del síndrome de la médula anclada, nuestros profesionales médicos han atendido todo tipo de variantes.
“El síndrome de la médula anclada solía considerarse poco frecuente”, dijo Thomas M. Moriarty, MD, Ph.D. “Ya no es tan así. En Louisville, nuestros pediatras y subespecialistas pediátricos, especialmente en ortopedia, neurología, urología, ginecología pediátrica y gastroenterología, son muy sensibles a los signos y síntomas de este síndrome”.