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Su hijo probablemente esté ansioso o nervioso ante el prospecto de una estadía en el hospital o una cirugía. Como padre, quizás no esté seguro de qué decirle a su hijo y cuándo decirlo.
La información apropiada para la edad puede aliviar el estrés al echar por tierra parte del misterio de lo que va a suceder y darle a su hijo un mayor sentido de participación en los planes.
Nuestros terapistas de vida infantil están disponibles para ayudar a su hijo y su familia a comprender mejor lo que sucederá y ayudar a preparar a su hijo para su experiencia en el hospital.
Los niños que reciben una explicación sobre el procedimiento suelen tener menos miedo y ansiedad. Con una mayor comprensión de lo que está sucediendo y su papel, los niños tienden a seguir mejor las instrucciones del proveedor.
Proporcione información precisa e intente hacerlo con los términos más amables posible. Explíquele a su hijo el propósito del procedimiento, la secuencia anticipada de eventos y cuánto tiempo tomará. Usted, el equipo médico o los terapistas de vida infantil también pueden decirle a su hijo lo que verá, escuchará, sentirá u olerá.
Cuando explique algo sobre el hospital o un procedimiento, sea honesto con su hijo.
No le diga que un procedimiento doloroso no va a doler. Intente describir lo que va a sentir. Por ejemplo, al insertar una vía intravenosa o aplicar una inyección, un terapista de vida infantil generalmente le dice al paciente que se sentirá similar a una picadura de abeja.
Hay pasos específicos para la edad que puede tomar para ayudar con el dolor.
Si no sabe la respuesta a una pregunta que le hace su hijo, sea honesto y dígale que no sabe.