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Las anomalías cardíacas congénitas son anomalías en el corazón que están presentes cuando nace un bebé. Las anomalías cardíacas pueden variar de leves a graves.
Cuando una persona tiene una anomalía cardíaca, decimos que tiene cardiopatía congénita. Una persona tiene una cardiopatía congénita durante toda la vida, incluso si se repara en la infancia.
Los especialistas del Norton Children’s Heart Institute, afiliado a la Facultad de Medicina de la UofL, son los principales proveedores de cuidados cardíacos pediátricos en Louisville y el sur de Indiana. Tienen vasta habilidad y experiencia en el tratamiento de cardiopatías congénitas.
Nuestros especialistas certificados pueden proporcionar un diagnóstico preciso de la cardiopatía congénita de su hijo y desarrollar un plan de tratamiento personalizado para usted y su hijo, de por vida.
Nuestros especialistas en cardiopatías congénitas en adultos brindar atención avanzada a medida que los pacientes envejecen.
No todas las cardiopatías congénitas necesitan cirugía. Nuestros especialistas tienen la experiencia para saber cuándo una afección se resolverá sola y cuándo es más compleja.
En ocasiones, nuestros cirujanos cardiotorácicos deben realizar operaciones de emergencia después del nacimiento. Otras veces, la afección solo necesita seguimiento o puede tratarse con medicamentos.
Las anomalías cardíacas congénitas ocurren debido a un desarrollo incompleto o anormal del corazón del bebé durante las primeras semanas del embarazo. Algunas anomalías están asociadas a trastornos genéticos, como el síndrome de Down, pero se desconocen las causas de la mayoría de las anomalías cardíacas congénitas. Aunque estas anomalías no se pueden prevenir, hay muchos tratamientos disponibles.
Nuestros especialistas están preparados para tratar una gama completa de defectos y anomalías cardíacas congénitas, que incluyen:
A las ocho semanas, las cuatro cavidades del corazón están completamente formadas y cualquier anomalía cardíaca congénita estará establecida.
El corazón comienza a desarrollarse en la concepción y empieza a latir 22 días después. Si aparece una cardiopatía congénita, será durante las primeras ocho semanas de gestación.
El crecimiento del corazón ocurre en etapas específicas y en momentos específicos del desarrollo de un bebé. Si se omite una etapa u ocurre fuera de la secuencia normal, pueden aparecer defectos: un orificio entre las cavidades, desviación de arterias importantes, válvulas defectuosas y otras afecciones.
El latido del corazón del bebé puede verse en la ecografía después de unas cinco semanas. Un ecocardiograma fetal puede mostrar una afección cardíaca a alrededor de las 16 a 18 semanas de gestación.
Debido a que las anomalías congénitas a menudo afectan la capacidad del corazón para bombear sangre y llevar oxígeno a los tejidos del cuerpo, suelen producir signos reveladores, tales como:
Si nota alguno de estos signos en su bebé o niño, llame al médico de inmediato. Si el médico nota estos signos, podría derivarlo a un cardiólogo pediatra, un médico que se especializa en el tratamiento de las afecciones cardíacas.
Algunas anomalías cardíacas congénitas causan síntomas graves inmediatamente después del nacimiento. En ese caso, el bebé irá a la unidad de cuidados intensivos neonatales (UCIN) en el Norton Children’s Hospital o el Norton Women’s & Children’s Hospital para una evaluación inmediata. Es posible que otras anomalías no se diagnostiquen hasta la adolescencia, o incluso la edad adulta.
Evaluación antes del nacimiento
Un ecocardiograma fetal es un tipo especializado de ecografía que puede diagnosticar afecciones cardíacas durante el embarazo desde apenas las 16 a 18 semanas de gestación. El Norton Children’s Heart Institute ofrece pruebas de ecocardiografía fetal en ubicaciones de Kentucky y el sur de Indiana.
El médico obstetra puede pedir un ecocardiograma fetal cuando se observa una posible anomalía cardíaca en una ecografía de embarazo de rutina. Los ecocardiogramas fetales también se realizan si otro familiar cercano tiene una cardiopatía congénita o si la madre tiene una afección, como diabetes, que podría poner al bebé en mayor riesgo de padecer una afección cardíaca.
Evaluación del recién nacido
Al menos 24 horas después del nacimiento, a los recién nacidos en EE. UU. se les realiza una prueba de detección con un oxímetro de pulso para detectar niveles bajos de oxígeno que pueden ser un signo de cardiopatía congénita. Esta es una prueba simple e indolora en la que se coloca un sensor en la piel del bebé para calcular cuánto oxígeno hay en la sangre del bebé.
Si la prueba revela un problema, el tratamiento puede comenzar de inmediato. La prueba detectará la mayoría de las anomalías cardíacas graves, pero algunos bebés con resultados normales podrían tener una afección cardíaca, como coartación de la aorta u otros defectos que no reducen directamente los niveles de oxígeno.
Los tratamientos pueden variar ampliamente, desde medicamentos hasta cirugía y un trasplante de corazón. Actualmente hay más tratamientos disponibles que nunca para las cardiopatías congénitas, y la mayoría de los tratamientos tienen una alta tasa de éxito.
Una cardiopatía congénita no significa que un niño no pueda llevar una vida saludable y activa. En colaboración con el equipo experto de atención médica del Norton Children’s Heart Institute, obtendrá un plan de tratamiento basado en las necesidades específicas de crecimiento y desarrollo de su hijo.